Mr. Olympia

De adolescente adoraba a un actor por encima de los demás. Ahora, con 28 años, me doy cuenta de que mi admiración por él no se basaba en sus dotes interpretativas ni mucho menos. Básicamente porque no las tiene. Le cogí cariño desde pequeña y me harté de ver todas sus películas una y otra vez. Algunas incluso me las ponía cada fin de semana, con lo cual memorizaba sus diálogos que repetía mientras veía ciertas escenas.

Me siento orgullosa por saber escribir su apellido sin buscarlo en la www.imdb.com. Me siento orgullosa de haber disfrutado como una enana con las películas de este austríaco hasta que empezó a protagonizar bodrios del estilo de Junior (1994). Aunque se lo perdoné y lo volví a seguir en Eraser (1996), Batman y Robin (1997) y End of Days (1999).

He de reconocer que, aunque, la mayor parte de su filmografia apesta para buena parte del mundo cinéfilo, ha participado en varias obras maestras del cine. Quién osa pensar en un Conan que no sea él? (o Jorge Sanz, lol). Y en un T-800 sin su rostro?

La chulería iba de su mano, no hay más que escuchar ciertos diálogos de John Matrix en Commando (1985), Dutch en Predator (1987), Douglas Quaid diciéndole a Sharon Stone "Considérate divorciada" justo después de pegarle un tiro en la cabeza en Total Recall (1990) o el gran Ben Richards en The Running Man (Perseguido) (1987).



El género predominante fué la acción pero también encontró un hueco en dos comedias que he visto millares de veces. Gracias a Ivan Reitman, Arnold, nos mostró su lado más gracioso y entrañable en Kindergarten Cop (1990) y Twins (1988).

Qué grande eres Arnold, en casi todos los sentidos. Y qué grande James Cameron por meterlo en 3 pe-li-cu-lo-nes!