Dead Silence (2007)
Del latín Venter (Vientre) y Loqui (Hablar) deriva el término Ventrílocuo.
La feliz existencia de Jamie y Lisa se ve truncada la noche que reciben un extraño paquete. Ha llegado hasta su puerta una caja sin remite con un muñeco de ventrílocuo dentro.
Mientras Jamie ha salido a buscar comida china, Lisa es brutalmente asesinada presuntamente por Billy, el muñeco asesino pariente lejano de aquel mítico Good Guy.
Jamie parece haberse convertido en el principal sospechoso del asesinato, es entonces cuando decide volver a su pueblo natal, Raven's Fair. Lugar de donde proviene una extraña leyenda que cuenta que el fantasma de una ventrílocua llamada Mary Shaw se les aparece a los habitantes del pueblo para, acto seguido, arrancarles la lengua de cuajo. Hay que decir que Mary tiene sus razones, cuando andaba viva por teatros actuando con sus muñecos la acusaron de matar a un niño y entonces los vecinos de Raven's Fair se tomaron la ley por su propia mano (...de que me suena esto?), la cazaron y la mataron, no sin antes arrancarle la lengua.
Aunque se desmarca un poco de los hilos argumentales que últimamente inundan las carteleras con un cine de terror de atmósfera un tanto gótica y con unos muñecos que realmente dan miedo, Dead Silence se parece más a un capítulo de la serie Masters of Horror que a una película presentada en el último festival de cine fantástico de Catalunya (Sitges 07).
Dirigida por James Wan, realizador que nos sorprendió allá por 2003 con su ópera prima, Saw, ésta vez nos trae una historia totalmente diferente pero con algunos dejes de su antecesora. Me he dado cuenta de que durante los 90 minutos de metraje no ha habido ni un solo susto...A una película de terror le pido innovación (por favor) en el argumento, efectos visuales aceptables, una buena atmósfera terrorífica, algún sobresalto y sobretodo un gran clímax final. En este sentido la película se queda a medio camino y no acaba de cumplir las expectativas, pero se deja ver.
Eso sí, el final me ha dejado un buen regustillo.
Al final me han llegado reminiscencias de Killer Klowns from Outer Space (1988), qué grandes películas se hacían antaño!
La feliz existencia de Jamie y Lisa se ve truncada la noche que reciben un extraño paquete. Ha llegado hasta su puerta una caja sin remite con un muñeco de ventrílocuo dentro.
Mientras Jamie ha salido a buscar comida china, Lisa es brutalmente asesinada presuntamente por Billy, el muñeco asesino pariente lejano de aquel mítico Good Guy.
Jamie parece haberse convertido en el principal sospechoso del asesinato, es entonces cuando decide volver a su pueblo natal, Raven's Fair. Lugar de donde proviene una extraña leyenda que cuenta que el fantasma de una ventrílocua llamada Mary Shaw se les aparece a los habitantes del pueblo para, acto seguido, arrancarles la lengua de cuajo. Hay que decir que Mary tiene sus razones, cuando andaba viva por teatros actuando con sus muñecos la acusaron de matar a un niño y entonces los vecinos de Raven's Fair se tomaron la ley por su propia mano (...de que me suena esto?), la cazaron y la mataron, no sin antes arrancarle la lengua.
Aunque se desmarca un poco de los hilos argumentales que últimamente inundan las carteleras con un cine de terror de atmósfera un tanto gótica y con unos muñecos que realmente dan miedo, Dead Silence se parece más a un capítulo de la serie Masters of Horror que a una película presentada en el último festival de cine fantástico de Catalunya (Sitges 07).
Dirigida por James Wan, realizador que nos sorprendió allá por 2003 con su ópera prima, Saw, ésta vez nos trae una historia totalmente diferente pero con algunos dejes de su antecesora. Me he dado cuenta de que durante los 90 minutos de metraje no ha habido ni un solo susto...A una película de terror le pido innovación (por favor) en el argumento, efectos visuales aceptables, una buena atmósfera terrorífica, algún sobresalto y sobretodo un gran clímax final. En este sentido la película se queda a medio camino y no acaba de cumplir las expectativas, pero se deja ver.
Eso sí, el final me ha dejado un buen regustillo.
Al final me han llegado reminiscencias de Killer Klowns from Outer Space (1988), qué grandes películas se hacían antaño!
Escrito por Elizabeth Darko a las 20:32
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